Estamos en temporada de higos y antes de que se acabe vale la pena aprovechar para preparar cositas ricas. Hoy traigo unos polos refrescantes fáciles de hacer y con pocos ingredientes.
Lleva higos bien maduros, con lo cual no hace falta añadir azúcar, ya que están dulces y queso mató (del Pirineo). Igualmente puedes utilizar un queso fresco o requesón.
Es una receta ideal para una merienda o para tomar a cualquier hora. El mató los hace un poco cremosos y acompañando con un poco de chocolate y con frutos secos, son un disfrute.
En poco tiempo tendrás unos polos cremosos, naturales y llenos de sabor.
Ingredientes:
Higos bien maduros (la cantidad depende de cuántos polos quieras hacer)
Queso mató del Pirineo o queso fresco (aproximadamente 200 g por cada 6 higos)
Cómo preparar los polos de higos:
1. Lava bien los higos y córtalos en cuartos. Si lo prefieres, puedes pelarlos, aunque la piel es comestible y le da un toque especial.
2. Tritura los higos junto con el queso mató en una batidora o procesador de alimentos hasta obtener una mezcla cremosa.
3. Vierte la mezcla en moldes para polos, llenando cada uno hasta el tope.
4. Congela durante al menos 4 horas, o hasta que los polos estén completamente firmes.
5. Acompaña con frutos secos o bien con chocolate.
¡Y listos!
¡Y listos!