Sepia encebollada: un guiso tradicional que siempre apetece
La primavera y el inicio del verano son temporadas ideales para disfrutar de la sepia (o choco, como se le llama en algunas zonas), un producto fresco y versátil que nos permite preparar platos llenos de sabor. Su carne tierna y sabrosa combina a la perfección con elaboraciones sencillas, como esta receta clásica de sepia encebollada.
Este tipo de guisos tienen una ventaja añadida: se pueden preparar con antelación y reposados están aún más ricos. Son perfectos para dejar hechos y disfrutar en cualquier comida con familia o amigos, acompañados de un buen pan o una guarnición ligera.
Hoy te propongo una receta de las de siempre, fácil de hacer y perfecta para cualquier ocasión. Muchas veces la preparamos sin el añadido del tomate, y otras veces con tomate. La verdad es que en casa la repetimos mucho, porque nos encanta.
Este plato es muy versátil a la hora de acompañar con guarniciones, como arroz blanco, patatas cocidas, ensalada fresca, judías blancas salteadas.. por poner unos ejemplos.
Sepias pequeñas (limpias)
2 cebollas
2 dientes de ajo
200 ml de vino blanco
1 hoja de laurel
Aceite de oliva virgen extra
Sal
Perejil fresco
Tomate triturado (opcional)
Pela los ajos y las cebollas. Corta las cebollas en juliana fina y los ajos a láminas.
En una cazuela, rehoga primero los ajos y después la cebolla con un chorrito de aceite de oliva a fuego medio, durante unos 15 minutos, hasta que esté bien pochada.
Si quieres, añade un poco de tomate triturado para darle un toque más meloso.
Incorpora la hoja de laurel y el vino blanco. Deja que se evapore el alcohol unos minutos.
Corta la sepia en trozos y añádela a la cazuela.
Este tipo de guisos tienen una ventaja añadida: se pueden preparar con antelación y reposados están aún más ricos. Son perfectos para dejar hechos y disfrutar en cualquier comida con familia o amigos, acompañados de un buen pan o una guarnición ligera.
Hoy te propongo una receta de las de siempre, fácil de hacer y perfecta para cualquier ocasión. Muchas veces la preparamos sin el añadido del tomate, y otras veces con tomate. La verdad es que en casa la repetimos mucho, porque nos encanta.
Este plato es muy versátil a la hora de acompañar con guarniciones, como arroz blanco, patatas cocidas, ensalada fresca, judías blancas salteadas.. por poner unos ejemplos.
Ingredientes:
Sepias pequeñas (limpias)
2 cebollas
2 dientes de ajo
200 ml de vino blanco
1 hoja de laurel
Aceite de oliva virgen extra
Sal
Perejil fresco
Tomate triturado (opcional)
Preparación:
Pela los ajos y las cebollas. Corta las cebollas en juliana fina y los ajos a láminas.
En una cazuela, rehoga primero los ajos y después la cebolla con un chorrito de aceite de oliva a fuego medio, durante unos 15 minutos, hasta que esté bien pochada.
Si quieres, añade un poco de tomate triturado para darle un toque más meloso.
Incorpora la hoja de laurel y el vino blanco. Deja que se evapore el alcohol unos minutos.
Corta la sepia en trozos y añádela a la cazuela.
Sazona al gusto, vierte poco de agua y tapa.
Cocina a fuego suave-medio durante unos 20 minutos, o hasta que la sepia esté tierna.
Antes de servir, puedes espolvorear un poco de perejil fresco picado.
Antes de servir, puedes espolvorear un poco de perejil fresco picado.
0 Comentarios