Estamos en plena temporada de fresas y mientras dura la temporada vale la pena aprovechar para hacer conservas y mermeladas. Hace tiempo que no preparo ninguna y la verdad que ya lo echaba de menos.
Las fresas son de las frutas que más me gustan para preparar mermeladas y chutneys, y guardarla para los desayunos, con esas deliciosas tostadas y un poco de mantequilla acompañando un buen café. Quien dice desayunos, dice meriendas o entre horas, con unas galletas, un yogur o un poco de queso.
Y como no es nada complicado, no cuesta nada ponerse, la verdad sea dicha. Solo necesitas un poquito de tiempo y mimo. En muchas de las mermeladas combino más de una fruta, como la mermelada de fresa y plátano con menta, o añado un poco de cítrico. La de hoy lleva vinagre de Jerez, aportando un extra de sabor y aroma muy especial.
Al llevar vinagre, recuerda la receta de fresas con vinagre y pimienta, que es un clásico, con todas sus variaciones de distintos tipos de vinagre y hierbas aromáticas. En casa se preparaban mucho, un día de estos tengo que hacerlas de nuevo.
Cómo preparar Mermelada de fresas con vinagre
✔ Lavamos las fresas y las troceamos.
✔ Las mezclamos con el azúcar y las dejamos reposar unas horas. Puedes dejar en nevera hasta el día siguiente.
✔ La ponemos en un recipiente al fuego y añadimos el vinagre de Jerez. Cocemos a fuego lento.
✔ Vamos dando unas vueltas de vez en cuando hasta que veamos la textura que nos gusta.
✔ Si quieres que quede muy finita la puedes pasar por la procesadora. Yo lo dejo tal cual, me gusta encontrar los trozos de fruta.
✔ Llenamos los botes y los dejamos boca abajo hasta que se enfríen.
✔ Si haces mucha cantidad para guardar un tiempo, es mejor preparar los botes al "baño maría" para mayor seguridad.