Este verano he tenido la oportunidad de recoger mucha menta fresca y me he animado a preparar conservas y mermeladas con un toque de frescura.

Los tomates son ideales para las conservas y para preparar la salsa de tomate básica que es perfecta para tener siempre a mano.

Una de las mermeladas caseras que me faltaba por hacer es la de tomates. Hoy con menta fresca recién cogida y unos clavos de olor. El resultado es espectacular.

Ingredientes:

✔ 1 k de tomates maduros

✔ 500 g de azúcar

✔ 3 clavos

✔ 1 rama de menta fresca

✔ 1 limón, su zumo.

✔ Empezamos por pelar los tomates. Lo podemos hacer escaldando durante unos segundos, primero les hacemos un corte en forma de cruz en la base y luego los sumergimos en el agua (recién hirviendo) unos 12-15 segundos. Será suficiente para enfriarlos y pelarlos.
✔ Los cortamos a cuartos. Si te gusta más sin semillas, es el momento de sacarlas, yo las he dejado.

✔ En un bol mezclamos los tomates, el azúcar, los clavos de olor y la menta fresca.
✔ Agregamos el zumo de medio limón y lo dejamos macerar  unas 2-3 horas a temperatura ambiente. 

También lo podemos dejar toda la noche en la nevera tranquilamente y dejarlo hasta el día siguiente.

✔ Lo pasamos a un cazo y cocemos durante 30-40 minutos a fuego lento, lo vamos removiendo y vigilando que no se pegue, con cuidado, hasta obtener la textura que desees.

✔ Para mi gusto no hace falta triturar nada, siempre me gusta encontrar algún trocito.

✔ Cuando se enfríe un poco, retiramos los clavos y la menta y procedemos a llenar los botes que tendremos previamente esterilizados. Como no hago mucha cantidad los pongo los botes llenos y cerrados boca abajo y espero a que se enfríen. Esta mermelada la consumimos en poco tiempo, tampoco es que haga grandes cantidades.

"Panadons" de espinacas

En primer lugar preparamos la masa. En un recipiente mezclamos la harina, la levadura que hemos disuelto en un poco de agua tibia, el agua mineral y el aceite de oliva. Añadimos la sal al final.

Estiraremos cada una de las bolas formando círculos de unos 20 cm. de diámetro y un espesor de unos 4-5 mm. Si quieres hacerlas más grandes o pequeñas a tu aire, para gustos los colores.

La masa que sobra se puede congelar para posteriores usos.

La segunda parte es preparar el relleno:

Cocer las espinacas troceadas, yo lo hago al vapor, escurrir apretándolas muy bien y reservar.
En una cazuela calentamos aceite de oliva, y tostamos un pelin los piñones y las pasas, que mezclaremos con el ajo picado (opcional) y las espinacas, salpimentamos y reservamos.

También se hace, poniendo directamente las espinacas cocidas y los piñones y pasas por encima en crudo dentro de la masa, Pero a mi me gusta más saltearlo todo un poco antes.

Pasamos al horno precanlentado a 180º y los dejamos durante 15-20 minutos, veremos que se doran y los retiramos.

Dejamos enfriar  y ya los tenemos a punto para comer.

Espero que os haya gustado y os animéis a probarlos.

Hola! he vuelto pronto, la verdad es que no pensaba publicar nada hasta el lunes próximo, pero se ha terciado...

Parece que la harina hoy me llamaba, justo tenia 200 gramos que sobraban desde hacía tiempo y cacao en polvo. Claro... he pensado que algo tenía que hacer con ello, esto se tiene que usar!

Me ha venido de gusto un bizcocho de chocolate, luego han venido las peras y luego la idea de la preparación. Hoy me he inspirado en  webosfritos y en su manera de introducir la fruta entera.