Una de las preparaciones que es habitual por estas fechas, y que nos viene muy bien para utilizar en nuestros platos es la cebolla caramelizada.
Hoy, en vez de venir con un pan debajo del brazo, vengo con cebollas.
Así que manos a la cebolla y a llorar un ratito..
Cebollas caramelizadas
He necesitado:
Cebollas, puerros, cebolletas (puede ser variado)
Por un kilo de cebollas, 250 grs de azúcar
100 ml. de agua
Aceite de oliva y sal.
Preparación:
Pelamos, limpiamos las cebollas y cortamos en juliana. Preparamos una bandeja de horno, repartimos la cebolla cortada y rociamos con el aceite de oliva y un pelín de sal.
El horno lo tendremos precalentado a 200º y asamos las cebollas durante unos 20 minutos y dando algún que otro meneito para que se haga por todos los lados igual. Cuando estén asadas las retiramos.
En una cazuela preparamos el agua con el azúcar e introducimos las cebollas asadas anteriormente, las cocemos a fuego medio-lento unos 20 minutos.
Veremos como se va caramelizando y vamos dando vueltas con cuidado de que no se pegue. Cogerá un tono oscuro y brillante.
Dejamos enfriar y guardamos en los botes de cristal utilizando los métodos habituales. O bien los preparamos al baño María y cerramos herméticos, o bien cerramos y dejamos boca abajo hasta que se enfríen bien los tarritos. Aguanta mucho en la nevera.
Ya tenemos la cebolla caramelizada casera, perfecta para acompañar nuestros montaditos, pinxos y decorar nuestros platos festivos.
Ahora a pensar en recetas navideñas :)
¡Hasta la próxima!